Buscar este blog

miércoles, 8 de febrero de 2017

La vida durante la colonia

La época colonial es uno de los periodos más denostados de la historia a pesar de que fue en este tiempo en el que se comenzó a formar la nación mexicana como tal al darse el choque de culturas indígena y española. Sin embargo, los historiadores del gobierno nos han hecho creer que en esta época México vivió su Edad Media al considerar que en este tiempo al Iglesia Católica tenía s los mexicanos embrutecidos, y de cierto modo esta afirmación es cierta ya que el clero tenía un papel destacado en la vida de los habitantes de la Nueva España. Sin embargo, la historia oficial no nos dice que la Nueva España llegó a ser la colonia más rica y prospera del Imperio Español. Es probable que nuestro gobierno federal no explique todo esto para evitar que nuestro país tuvo una época de bonanza previa y de ese modo justificar el actual régimen. Esto es corroborado por la visita del Barón de Humboldt que llegó a la conclusión de que Nueva España tenía un nivel de vida superior al de la mayoría de los países europeos.
La verdad es que a mí me encanta en lo personal visitar ciudades coloniales como Querétaro, San Luis Potosí, Puebla o Zacatecas por su riqueza arquitectónica y cultural. He visitado algunas de esas ciudades por lo menos una vez en la vida y la verdad es que me encanta empaparme de la historia de dichos lugares. Las ciudades coloniales tienen un encanto sin precedentes que no tienen ciudades de Estados Unidos o Canadá. Uno de mis edificios favoritos en el país es la Catedral Basílica de Zacatecas, una joya del barroco de principios del siglo XVIII con su fachada de cantera rosa exquisitamente labrada por un escultor anónimo, sus dos torres de dos cuerpos rematadas por una linterna y con decoraciones en talavera debajo de estos. Puebla conserva sin duda no solo su imponente catedral, sino otros sitios como la Capilla del Rosario o la riqueza del acervo de la Biblioteca Palafoxiana. Querétaro tiene a la Casa de la Corregidora que fue donde se comenzó a gestar nuestra independencia aunque su catedral es bastante modesta. Todas guardan importantes obras de arte sacro, obras dedicadas a la filosofía, la literatura y la teología. Sin embargo, tal parece que a muchas personas no les interesa preservar su legado histórico, pues son pocos los que quieren aceptar  que somos descendientes de los conquistadores españoles.
En la colonia fue la época en la que los indígenas gozaron de más derechos  que en la actualidad ya que se había garantizado la posesión comunal sobre sus tierras. Esto no fue eliminado sino hasta la entrada de las Leyes de Reforma en vigor donde solo se reconocía la propiedad privada. Además de todo estaba prohibida su esclavitud hacia ellos en todo sentido. Esto fue logrado en parte gracias a la decisión de un indígena originario de lo que hoy es Querétaro de nombre Conín de negociar con los españoles después de la caída de Tenochtitlan las condiciones de las relaciones entre indígenas y conquistadores. Esto es un relato de la historia de la fundación de la ciudad de Querétaro que habla de una relación fraternal entre nativos y españoles dando el inicio a la fundación de la nación mexicana con la integración de las dos culturas que la conforman. Sin embargo esto es algo que no aparecerá en los libros de historia por lo menos en el corto plazo puesto que para ciertas personas es mejor hacernos creer que los españoles explotaban a los indígenas de manera generalizada puesto que es mejor que no creamos en lo contrario. Conín fue de hecho convertido en un noble por los “malvados españoles” y se convirtió en el primer gobernador de la provincia de Querétaro. Los españoles tuvieron la oportunidad de exterminar a los nativos tal y como lo hicieron los británicos, pero no lo hicieron de tal manera que aún hay nativos en esta región del continente. Conín debería ser pues un héroe que fundó una de las ciudades más prosperas de la Nueva España que aún sigue siéndolo en nuestros días tanto por su importancia económica como por su legado histórico.
Otra área artística que floreció en la Nueva España fue la literatura con escritores tales como Sor Juana Inés de la Cruz, Juan de la Cueva, Tipo de Molina y Eugenio Salazar. Otros literatos importantes Carlos de Sigüenza, Bernardo de Balbuena, Juan Ruiz de Alarcón, Francisco Bramón, Miguel de Guevara y hasta fray Juan de Torquemada. Estos escritores fueron muy apreciados tanto en España como en el continente. Sor Juana fue sin duda la máxima poetisa de la época con sus sonetos en los que criticaba la hegemonía del hombre que acusaba a la mujer de ser una inútil u no servir más que para las labores domésticas. Sor Juana fue sin duda una mujer adelantada a su época pues había estado estudiando libros de filosofía, literatura y el estudio de la naturaleza. Incluso cuando murió encontraron en su celda del convento más de 200 obras selectas.
Aun así no hay que dejar pasar que en México fue donde se fundó la primera universidad del continente: la Real y Pontificia Universidad de México. Sin embargo, la iglesia era la encargada de la educación en México y esto arrojó un analfabetismo del 98% en 1821 cuando se declaró la independencia. Esto sí que es algo criticable por parte de nosotros hacia el clero puesto que eso nos ha impedido tener un verdadero gobierno. Aun así la época colonial fue la etapa formativa de nuestra nación y de ninguna manera debe ser vista como una edad oscura. Sin embargo, a nuestra clase política no le conviene que sepamos esto dado que hemos estado mejor cuando estábamos peor.

Extra


En la época colonial también se inventaron las comidas que disfrutamos hoy, como el mole, los chiles rellenos y otros platillos que disfrutamos hoy día como parte de nuestra cultura de la que debemos sentirnos orgullosos.            

No hay comentarios.:

Publicar un comentario