Uno de los personajes más
admirados es el General Lázaro Cárdenas por la expropiación petrolera, la
reforma agraria y las organizaciones civiles. Sin embargo, yo considero que fue
uno de los peores gobernantes de nuestro país. Tengo motivos para pensar así
puesto que Cárdenas consolidó un sistema que todos odian por autoritario. Sin embargo,
pocos saben que este hombre fue uno de los mayores incongruentes de la historia
de nuestro país. Él también fue uno de los grandes defraudadores electorales,
ya que organizó el fraude electoral contra Juan Andrew Almazán en 1940. Con todos
estos defectos no sé cómo es que tiene tantos seguidores a nivel nacional en
estos tiempos, o mejor dicho sí. Esta propaganda del régimen priista que hasta
la fecha todo el mundo defiende por sus supuestos beneficios de este sistema al
que todos dicen odiar. Lázaro Cárdenas fue uno de los más férreos defensores
del sistema autoritario y claro que fue uno de los grandes creadores del estado
benefactor. Pero ahora entremos en materia.
Lázaro Cárdenas del Río
nace en Jiquilpan, Michoacán el 21 de mayo de 1895. En 1913 se incorpora a las fuerzas
revolucionarias y a los 25 años ya es general de división. Entre los eventos
importantes durante esos años está el hecho de que fue participante en los
hechos que llevaron a Venustiano Carranza a su muerte. Este es un hecho
perfectamente documentado por Enrique Krauze y Francisco Martín Moreno y fue un
evento por demás vergonzoso y quizá por eso ha sido ocultado por la historia
oficial. En resumidas cuentas, Cárdenas participó en el evento clave que llevó
a los sonorenses al poder durante los próximos 16 años. Álvaro Obregón y
Plutarco Elías Calles lo premiaron con varios cargos por su actuación, siendo
el más importante de ellos el de gobernador de Michoacán. Cárdenas se casó con
Amalia Solórzano, hija de un rico terrateniente michoacano con lo que obtuvo un
gran ascenso social. Y esto fue una gran incongruencia puesto que entre otras
cosas es recordado como el gran repartidor de tierras y con esto sus
descendientes son hasta la fecha propietarios de aserraderos y centros turísticos
en aquel estado. Su hermano Dámaso también fue gobernador de Michoacán y se
caracterizó por ser más corrupto que su hermano Lázaro ya que el primero sí
hizo fortuna mediante peculado.
Durante el Maximato fue
cuando Cárdenas subió a la presidencia de la república con la bendición de
Calles que tenía la intención de seguir mandando en el país. Sin embargo, el
Jefe Máximo cometió un error crucial al hacer esperar a su siguiente títere en
su hacienda de Navolato porque estaba en pleno juego de pocar. Es evidente que
Cárdenas se dio cuenta de la persona a la que iba a servir durante los
siguientes seis años y urdió un plan que hizo efectivo en 1936. Calles inició
su pleito con Cárdenas cuando se publicó un artículo en el periódico “El
Universal” en el que se expresaba muy del lacayo que había puesto en la
presidencia. Como respuesta, Cárdenas hizo que renunciaran a su cargo todos los
miembros del gabinete que eran adictos a Calles. Después de eso Calles fue
cesado del ejército aniquilando de este modo la posibilidad de recurrir a las
armas para recuperar el control del país ya que todo se le estaba yendo de las
manos. Finalmente, Cárdenas exilió a Calles del país al subirlo a un avión con
rumbo a Estados Unidos. Sin embargo, este fue un golpe nada democrático de los
que ha habido muchos en nuestro país. El presidencialismo absoluto se hizo
patente a partir del gobierno de Cárdenas puesto que en su sexenio fue cuando
se fundaron algunas organizaciones como la CTM o la CNC que tenían como fin
atar a la sociedad mexicana a los deseos del monarca (presidente) en turno. La reforma
agraria tuvo fines similares puesto que para obtener tierras era necesario
afiliarse a la CNC con el objetivo de acceder además a créditos y aperos. La destrucción
de los latifundios no trajo consigo el progreso del campo sino su destrucción y
abandono, algo que trate en entradas anteriores. Cárdenas recurrió al fraude
electoral en los comicios de 1940 en contra de Juan Andrew Almazán y a favor de
Manuel Ávila Camacho ante la popularidad del primero. En esas mismas elecciones
se le preguntaba a la gente por quién había votado y si contestaban que por el
general Almazán lo mataban ahí mismo en la casilla. No sé para que sirvió
mandar a Calles al exilio y no sé con qué cara reclamó a Díaz por el movimiento
de 1968 cuando el utilizó tácticas similares.
La expropiación petrolera
la deje para el final porque este es el evento por el que Lázaro Cárdenas se
hizo famoso. Dicho evento se dio porque en ese momento era inminente el
estallido de la Segunda Guerra Mundial y se temía que las compañías que
operaban en nuestro país quedaran en manos de las Potencias del Eje en caso de
que sus países de las que eran originarios sufrieran una invasión. Cabe mencionar
que en este periodo no fue cuando se dio el cierre a la iniciativa privada en
dicho ramo. Pero sí se espantaron los posibles inversionistas y se sentaron las
bases para la petrolización de la economía y no tengo que decir que los
resultados están a la vista. La industria petrolera está en el abandono total y
el resultado es que tenemos que importar la mitad de la gasolina que consumimos
el gobierno la ha sangrado brutalmente
sin que esto redunde en beneficios para la sociedad que supuestamente seria la
beneficiaria de la expropiación petrolera. Son los partidos políticos. Los gobernantes
en turno, el sindicato petrolero y sus líderes los que han despilfarrado el
dinero de la industria petrolera y el mexicano de a pie no ha visto ni siquiera
migajas. Esta es la funesta herencia de Cárdenas: una industria petrolera
prácticamente en bancarrota, un campo en el abandono y un sistema político autoritario
y corrupto. ¿Necesitan saber más acerca de por qué lo considero uno de los
peores gobernantes de México?
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